«En mi opinión, conforme la violencia vaya subiendo, los ciudadanos pedirán más seguridad a cambio de libertad. Esto nos llevará de nuevo a las Dictaduras y al fin de las Democracias.»
Es posible que haya dictaduras orwellianas pero serán transitorias hasta las dictaduras islámicas fundamentalistas. Nuestras élites han subestimado la fuerza de una ideología como el Islam. Se creen que, como han podido acabar con el cristianismo en Europa fácilmente, acabar con el Islam les será igual de fácil (y, mientras tanto, utilizan el Islam como una herramienta para dividir a la población y conseguir más poder para ellos).
Pero no se dan cuenta de que cargarse el cristianismo ha sido posible porque la nueva religión (el progresismo) es, en el fondo, una herejía cristiana, como ya observó Curtis Yarvin . Todos los conceptos que utiliza: libertad, igualdad, justicia social, estatus de la mujer, antiracismo, separación de religión y Estado son conceptos cristianos (aunque distorsionados y vueltos del revés). Por eso, ha sido posible reprogramar las mentes cristianas para que se vuelvan mentes progresistas. De hecho, el progresismo a lo largo de los siglos ha encontrado, a base de prueba y error, los trucos psicológicos perfectos para hacer esta transición.
Pero la mente musulmana trabaja de otra manera y nuestras élites son muy ignorantes de ello (su ideología progresista les hace sentirse superiores a los musulmanes y que su triunfo de la progresía es inevitable). Yo he estudiado por años el Islam y la forma de pensar de los musulmanes (no sólo en libros, sino también con amigos). Es posible que el progresismo seduzca a una minoría (sobre todo, la más acomodada) pero no a la mayoría. Además, las minorías occidentalizadas pronto se integran y disminuyen su natalidad, mientras que la mayoría que sigue fiel al Islam se reproduce mucho más.
Lo que tenemos aquí es un matrimonio de conveniencia entre la élite y el Islam. Los dos creen que se aprovechan del otro. La élite para conseguir más poder. El Islam para penetrar Occidente. La élite busca esa dictadura orwelliana. El Islam la dictadura fundamentalista. Pero cuando el Islam sea más mayoritario se producirá una ruptura. ¿Quién tiene más futuro? ¿Nuestras élites y la izquierda que a penas se reproducen? ¿O el Islam que tiene una tasa de reproducción sólida? El que gana el futuro es quien se presenta a él. El Islam tiene hijos y nuestras élites no. De él es el futuro.