Traducido desde el francés de «No society» de Christophe Guilluy.
De Francia a Estados Unidos, de Gran Bretaña a Italia, de Alemania a Escandinavia, la dinámica populista atañe a la misma geografía, las periferias urbanas y rurales, la misma sociología, las categorías modestas que representaban ayer la mayoría de la clase media. Este poderoso movimiento cultural revela también el gran secreto de la globalización: la desaparición de la clase media occidental.
Fiel a su estrategia de negar, ignorar o relativizar el problema, la clase dominante ha buscado de forma evidente minimizar esta contestación del orden dominante, presentándola como la reacción irracional, marginal, de una minoría de deplorables, de obreros o de poco educados. La sorpresa del voto a favor del Brexit, la elección de Donald Trump, la huelga populista europea, la permanencia del voto a Le Pen desde hace más de treinta años […] Son la consecuencia de un movimiento tectónico iniciado hace cerca de medio siglo por la implantación de un modelo económico y social que hace desaparecer la clase media occidental.