[Traducido y abreviado de https://charltonteaching.blogspot.com/2021/04/why-now-why-did-2020-have-to-wait-until.html]
¿Por qué el Poder Global esperó hasta 2020 para lanzar su golpe e implementar un gobierno totalitario global? La respuesta está en el tremendo éxito del golpe; y el hecho de que muy pocas personas lo hayan notado. La clave es no darse cuenta.
Algunos analistas hablan de que se trata de un totalitarismo «suave», porque se basa en la propaganda y la manipulación de la opinión pública más que en la violencia y el terror; pero esto es ver el asunto al revés. Lo que tenemos ahora no es un totalitarismo «suave», sino exitoso, y la necesidad de violencia y terror fue una señal del fracaso de los sistemas [totalitarios] anteriores.
Anteriormente en la historia, la visión del mundo de las personas se basaba en la religión (Dios o dioses) y en fuera de esta vida terrenal-mortal; lo que les daba una raíz, un foco y una coherencia de observación y pensamiento que ahora está completamente ausente. Ahora, los hombres están desarraigados, a la deriva e incoherentes, sin ser conscientes de ello.
Además, las personas del pasado vivieron en la «vida real» arraigadas en su propia experiencia y razonamiento de sentido común. Ahora la gente vive ‘virtualmente’ y obtienen su información e interpretaciones del Sistema; porque (careciendo de religión, negando lo espiritual) no saben nada, no experimentan nada que esté fuera del Sistema.
[Nota del traductor: Un ejemplo sería que la gente del pasado veía como algo obvio que los hombres y las mujeres eran diferentes, pues se suponía que nos podíamos fiar de los ojos y la razón, pues estos habían sido creados por Dios. Hoy en día, el Sistema nos enseña a desconfiar de nuestros poderes de observación y nos dice que confiemos en «expertos», los cuales piensan por nosotros, y que nos dicen que los hombres y las mujeres son iguales]
Los hombres ahora viven virtualmente dentro del Sistema, y el Sistema incluye todo el discurso y la actividad públicos: la política, el gobierno, el derecho, la economía, los medios de comunicación, la policía y el ejército, las iglesias, la ciencia, las artes, la educación … controlado burocráticamente y a través del sistema de información de los medios.
En el pasado, un gobierno totalitario del mundo habría sido demasiado difícil, más allá del alcance de cualquier autoridad; sobre todo porque habría sido obvio y habría provocado una resistencia vehemente y generalizada.
Pero ahora se ignora lo obvio; y se acepta lo falso que es respaldado por el Sistema, en contra de la experiencia personal y el conocimiento común.
Y (especialmente en el mundo desarrollado) las masas, la clase ‘experta’, la población en general, han sido tan degradadas y desmotivadas por varias generaciones de adolescentes cínicos que no han madurado, que no tienen coraje (porque el coraje requiere principios y los hombres sin Dios no tienen ninguna fundamento para los principios). [Como no existe Dios ni la otra vida, lo único que existe es el bienestar personal en esta vida, lo que hace que seamos cobardes e ignoremos cualquier principio si va contra nuestro bienestar personal. Al fin y al cabo, si todo es material, no existen principios.]
Entonces, esta vez, en 2020, el gobierno mundial se implementó con éxito y sin resistencia, porque el Sistema no se lo ha dicho explícitamente a la gente, por lo tanto, no lo saben.
E incluso si las personas piensan por sí mismas por un rato y, en consecuencia, comienzan a darse cuenta de lo que ha sucedido, su falta de principios y coraje significa que pronto se darán cuenta de que es más conveniente aceptar el Sistema porque. .. ¿Por qué no? ¿Qué otra cosa hay?
El totalitarismo moderno es, por lo tanto, tan efectivo porque la gente moderna ha subcontratado su pensamiento al Sistema.
Si la gente moderna pensara, realmente pensara; entonces el totalitarismo actual no sería posible; porque la gente observaría por sí misma, evaluaría por sí misma, se daría cuenta.
Serían libres en pensamiento porque se mantendrían firmes respecto al Sistema en su pensamiento.
Y ese pensamiento, ese tipo de pensamiento, simplemente hace una diferencia, objetivamente; porque con él participamos en la creación divina.